lunes, diciembre 11, 2006

La Importancia de vivir


La importancia de vivir
Lin Yutang


Apenas en 1998 tuve al placer, a través de una librería de viejo, de hacer llegar a mis manos un libro excepcional del escritor chino Lin Yutang (1895-1976, Changzhou, China).
De vasta formación cultural, Yutang llega a Occidente para estudiar en universidades como las de St. John de Shanghai, de Harvard y de Leipzig. Lo aprendido en este lado del mundo da al escritor una visión que plasma en La Importancia de vivir (También traducido como "El placer de vivir) de forma magistral. Uno no sabe si él se pitorrea de la vida sedentaria y canibalesca que nos hace sentir a los occidentales los "progresistas del universo", o trata de orientarnos hacia esa vida en donde el hedonismo no carcome sino integra al ser humano; lo vuelve real. Al repasar estas páginas entrañables, uno no sabe uno aquel "placer” del que habla Yutang es realmente.
Lo que uno sí llega a sentir, en la lectura de este libro, es un éxtasis casi infinito, una envidia cortante por la forma de actuar de este chino-occidental, quien en cada actividad de la vida, sea descansar, leer, pensar, comer, beber, fumar, dormir o no hacer nada, tiene siempre una fórmula de embeleso hacia la existencia, no conocida por nosotros.

Sus libros están llenos de citas, frases, aforimos. Con el puro propósito de que el lector llegue un día a la librería y pregunté por La importancia de vivir (Ed. Hermes, 1991) , mostramos aquí algunas de esas extrañas formas de concebir la vida como un actuar y un pensar de la manera más que placentera.


* "El hombre superior ama su alma; el hombre inferior ama su propiedad".
* "Vive como si no fueras a morir nunca, actúa como si fueras a morir mañana".
* "El máximo de poder es la iniciación de la decadencia."
* "La sabiduría de la vida consiste en eliminar lo que no sea esencial".
* "El humor es parte de la vida y en consecuencia no debe ser excluido, ni aun de la
literatura seria."
* "Los libros no deben clasificarse nunca. Clasificarlos es una ciencia, pero no un arte."
* "En esta vida hay lágrimas, y lo que importa, después de todo, es lo que pasa ante que
lloremos".
* "Si no puedes vivir una vida bella, debes soñarla".
* "Perdonamos a los grandes del mundo porque han muerto; pero en vida son
imperdonables".
* "Los que son sabios, poco hablan; y los que hablan mucho, son poco sabios".
* "Hay dos maneras de difundir la luz... ser la lámpara que la emite, o el espejo que la refleja".
* "No hay condición tan baja que no tenga esperanzas, ni ninguna tan alta que no inspire temor"
* "Bromear es una de las cosas amenas de la vida, pero cuesta muchos años de aprendizaje".
* "No hay una edad para empezar a ser galante ni para dejar de serlo".
* "Un hombre educado es el que tiene los amores y los odios juntos"
* "Nuestras vidas no están en manos de los dioses, sino en manos de nuestros cocineros".

En una de sus páginas, Lin Yutang simplemente referirá (en sus propios términos) qué cosas son las que lo harían feliz:

"He aquí las cosas que me harían feliz. No deseo otras. Quiero un cuarto propio donde poder trabajar. Un cuarto ni particularmente limpio ni ordenado... sino confortable, íntimo y familiar. Con una atmósfera llena de humo y el olor de viejos volúmenes y de incontables olores... Quiero trajes decentes que haya usado por algún tiempo y un par de zapatos viejos. Quiero una ducha en verano y un buen fuego con leños en invierno. Quiero un hogar donde poder ser yo mismo. Quiero algunos buenos amigos que sean tan familiares como la vida misma; amigos con los que no haya necesidad de ser cortés y que me cuenten todas sus dificultades, las matrimoniales y las demás; amigos capaces de citar a Aristóteles y de contar cuentos subidos de color; amigos que sean espiritualmente ricos y que puedan hablar de obscenidades y de filosofía con el mismo candor; amigos que tengan aficiones y opiniones definidas sobre las cosas, que tengan sus creencias y respeten las mías.Quiero una buena cocinera que sepa hacer sopas deliciosas y un viejo sirviente que piense que yo soy un gran hombre, pero no sepa en qué reside mi grandeza.Quiero una buena biblioteca, buenos cigarros y una mujer que me comprenda y me deje libertad para hacer mi trabajo.Quiero libertad para ser yo mismo".
(Recopilación I.G.)